Las ventas de discos duros tradicionales (HDD) están experimentando un resurgimiento notable, con un incremento de más del 50% en el último año, una tendencia al alza que se mantiene firme. Durante años, las unidades de estado sólido (SSD) dominaron el mercado gracias a su mayor velocidad y eficiencia, pero los HDD están recuperando terreno, principalmente impulsados por la creciente demanda en centros de datos, donde su capacidad y coste por terabyte los hacen más atractivos en comparación con las SSD.
Dos gigantes del sector, Seagate y Western Digital, encabezan este crecimiento. Seagate ha reportado un incremento del 55% en sus ingresos por discos duros en el primer trimestre del año fiscal 2025 respecto al mismo período de 2023. La empresa ha visto cómo sus ingresos ascendieron casi a 2.000 millones de dólares desde los 1.300 millones anteriores, y el precio de venta promedio aumentó de 108 a 154 dólares por unidad, reflejando una preferencia del mercado por discos de mayor capacidad.
Western Digital también disfruta de un panorama positivo. En el mismo período, sus ingresos se dispararon de 1.200 millones a 2.208 millones de dólares, un crecimiento del 85%. La compañía ha mejorado notablemente su margen de beneficio bruto, del 22,9% al 38,1%, y distribuyó 13,2 millones de discos duros, un 27% más que el año anterior, con un aumento en el precio de venta promedio de 112 a 164 dólares.
Este entusiasmo renovado por los HDD se debe en gran parte al auge de los centros de datos y las aplicaciones de inteligencia artificial (IA). Estos sectores demandan soluciones de almacenamiento masivo y económicas, y los discos duros presentan una opción difícil de igualar en términos de coste por terabyte. Aunque las SSD han avanzado en velocidad y capacidad, los HDD siguen siendo la elección predilecta en infraestructuras de grandes volúmenes, como las granjas de servidores.
Por otro lado, el resurgimiento de los HDD se explica por su ventaja en precio/capacidad frente a las SSD. Mientras que las unidades de estado sólido ofrecen una buena relación calidad-precio en capacidades de hasta 2 TB, los HDD mantienen su superioridad en unidades de mayor capacidad, esenciales para el sector empresarial. Discos duros de 4 TB, 8 TB o superiores resultan más rentables que sus equivalentes en SSD, lo cual es crucial para entornos con altas necesidades de almacenamiento.
Proyecciones de la IEEE indican que el mercado de los discos duros seguirá en auge, siempre que los fabricantes logren ampliar las capacidades de los discos y bajar aún más el coste por terabyte. Este crecimiento también dependerá de la evolución del mercado de las SSD en términos de precio y capacidad, especialmente si las unidades de estado sólido consiguen competir en precio con los HDD en el rango de altas capacidades.
A pesar de la intensa competencia en el mercado de almacenamiento, los discos duros han probado que todavía tienen un papel relevante en la era digital, especialmente en sectores donde el almacenamiento masivo y a bajo coste es indispensable.