En un esfuerzo por proteger al sector ganadero de la región y mitigar las posibles pérdidas económicas y de producción, la Consejería de Medio Ambiente, Agricultura e Interior ha lanzado una ambiciosa campaña de vacunación gratuita contra la lengua azul. Esta iniciativa se enmarca dentro de las medidas de prevención, vigilancia y control instauradas ante la amenaza que representa esta enfermedad para los rebaños locales.
El programa de vacunación se desplegará sobre 166,000 cabezas de ganado, abarcando 95,000 bovinos y 71,000 ovinos. Toda la región ha sido clasificada como zona suspendida para los serotipos 4 y 8 del virus, y se han identificado áreas específicas –concretamente en las comarcas de El Escorial, San Martín de Valdeiglesias y Navalcarnero– donde también se considera el riesgo de los serotipos 1 y 3.
Desde el pasado 14 de noviembre, la Dirección General de Agricultura, Ganadería y Alimentación comenzó la administración de dosis contra el serotipo 3. Esta acción complementa la estrategia en curso, que incluye a los serotipos 1 y 8 y continúa con el serotipo 4, cuya vacunación se implementó en diciembre de 2023 en toda la Comunidad de Madrid. La complejidad de controlar este virus se debe, en gran parte, a su propagación a través de los mosquitos.
Afortunadamente, la lengua azul no supone un riesgo para la salud humana ni afecta a los productos de origen animal. Sin embargo, su impacto es devastador en rumiantes, especialmente vacas y ovejas. La región ha registrado hasta el momento tres casos de esta enfermedad, conocida por su rápida difusión y altas tasas de morbilidad. Las manifestaciones y lesiones resultantes pueden comprometer seriamente la viabilidad de las explotaciones, produciendo un elevado número de abortos y una notable mortalidad en las especies afectadas.
En apoyo a esta campaña, la Comunidad de Madrid ha aprobado dos partidas de subvenciones. Una de ellas, destinada a las Agrupaciones, asciende a 1,2 millones de euros, mientras que más de un millón de euros se ha asignado a la empresa Tragsatec para cubrir el coste de administración de las vacunas por veterinarios en todas las explotaciones ganaderas de la región.
Con estas medidas, el Ejecutivo autonómico refuerza su compromiso de salvaguardar la salud de los rebaños y asegurar la estabilidad del sector ganadero, garantizando así una respuesta coordinada y efectiva ante la amenaza persistente de la lengua azul.