La Guardia Civil detuvo a un hombre de 46 años en conexión con el ataque a los religiosos del convento de Santo Espíritu del Monte, en Gilet, Valencia. El sujeto fue aprehendido durante la madrugada del domingo y trasladado al cuartel de la Guardia Civil en Puçol. El violento episodio ocurrió cuando el agresor saltó la valla del monasterio y atacó a siete frailes utilizando un bastón, un báculo y una botella de cristal. Uno de los religiosos, de 76 años, sufrió un traumatismo craneoencefálico y está en estado crítico en el Hospital Clínico de Valencia. Otros tres fueron hospitalizados con diversas lesiones y contusiones, mientras que un fraile de 57 años recibió el alta. El Ayuntamiento de Gilet agradeció la labor de las fuerzas de seguridad y emitió mensajes de calma y tranquilidad a la población.
El alcalde de Gilet, Salva Costa, relató los angustiosos momentos vividos en el monasterio, destacando que la violencia del ataque, perpetrado cuando solo los frailes se encontraban en el lugar, pilló a la comunidad por sorpresa debido a la habitual calma del enclave. Costa subrayó que la identidad del atacante no era conocida por los vecinos ni los frailes, añadiendo que el lugar nunca había experimentado algo similar, siendo un destino para quienes buscan espiritualidad o preparación para oposiciones. La máxima autoridad municipal ha mantenido contacto directo con las víctimas para evaluar sus necesidades tras el suceso. El ataque ha causado conmoción en la comunidad, que reconoce al convento como un lugar dedicado a la ayuda a los más necesitados.
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