En medio de un creciente malestar, diversos sectores han arremetido contra el Gobierno por no cumplir con su compromiso de diálogo y transparencia. Las críticas surgen tras el envío de una carta por parte de varios partidos políticos, la cual solo ha recibido un acuse de recibo como respuesta formal. Este gesto ha sido interpretado como una falta de seriedad hacia las demandas planteadas, lo que ha intensificado las tensiones y el descontento en el ámbito político.
Los partidos políticos implicados esperaban una respuesta más sustancial que ayudara a aclarar las posiciones del Gobierno sobre temas críticos que afectan directamente a la población. Sin embargo, la ausencia de una comunicación efectiva ha generado incertidumbre y ha llevado a los líderes a cuestionar la voluntad del Ejecutivo de abordar de manera constructiva los asuntos planteados. Ante esta situación, se está evaluando la posibilidad de tomar acciones más contundentes para presionar al Gobierno a cumplir con sus compromisos establecidos.
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