La salud del rey Mohamed VI de Marruecos, quien cumplió 61 años, se deteriora rápidamente, evidenciándose en sus escasas apariciones públicas. Recientemente, fue visto tembloroso y necesitando ayuda durante una breve audiencia con el atleta Soufiane El Bakkali en el palacio real de Tetuán. Se especula que el monarca padece sarcoidosis y la enfermedad de Hashimoto, además de haber sido sometido a múltiples intervenciones quirúrgicas. A pesar de su ausencia prolongada y problemas de salud, mantiene un control firme sobre la economía y la política del país. La posibilidad de una abdicación parece lejana, y el príncipe heredero Mulay Hasán, quien ha aumentado su visibilidad pública, podría asumir más responsabilidades conforme el rey se debilita. La sucesión genera especulaciones y destaca el poderío y la opacidad de la familia real marroquí.
Leer noticia completa de Internacional en El Independiente.
Resumen de privacidad
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.