En un evento cargado de emociones y reflexión, los profesionales del sector asistencial llevaron a cabo una jornada que destacó tanto la introspección personal como el fortalecimiento colectivo. Entre las actividades más significativas se incluyó la lectura de un cuento diseñado para fomentar la reflexión interior y la conexión emocional. Este ejercicio permitió a los asistentes compartir sus pensamientos sobre lo que les emociona, desgasta y sostiene en su ámbito laboral, subrayando la crucial importancia de las relaciones y el trabajo en equipo como pilares fundamentales de su rutina diaria.
La jornada continuó con una dinámica gincana comunitaria que brindó a los participantes la oportunidad de familiarizarse con los recursos disponibles para trabajar de manera conjunta en la atención asistencial. Este enfoque colaborativo no solo enriquece la actividad profesional, sino que fortalece los lazos de confianza con la comunidad. La gincana culminó con la creación de un escudo colectivo que simboliza sus fortalezas como equipo, reflejando el espíritu de unidad y cooperación.
Como símbolo del año transcurrido, también se realizó un intercambio de libros entre los participantes. Este gesto, más allá de su significado literario, representó el acompañamiento y el consuelo que las lecturas brindaron durante meses complejos.
La jornada contó con la presencia de figuras destacadas de la administración sanitaria, incluyendo a Paloma Santos Álvarez, gerente adjunta de Asistencia Sanitaria, y a Paz Vítores e Inmaculada García Ferradal, directoras asistenciales de la Dirección Asistencial Sur. Asimismo, Gemma Vázquez y Javier López de Haro, responsables de centros, participaron activamente en las actividades del día, compartiendo sus impresiones y experiencias con el equipo.
En conjunto, estas actividades no solo fomentaron la cohesión y el apoyo mutuo entre los profesionales, sino que también recordaron la vital importancia del trabajo en red y la rica interacción con la comunidad a la que sirven.