Las Fuerzas de Defensa de Israel están preparadas para una posible invasión del Líbano, según declaró el jefe del Estado Mayor, Herzi Halevi, durante su visita a las tropas en el norte del país. Halevi informó que los bombardeos aéreos han alcanzado 280 objetivos solo en la jornada del miércoles, creando las condiciones necesarias para la incursión terrestre. En apoyo a esta ofensiva, dos brigadas adicionales en la reserva han sido alertadas para un posible despliegue. Halevi aseguró a las tropas que los operativos de Hizbulá, grupo al que ve como principal amenaza, enfrentarán a una fuerza militar profesional y experimentada.
El anuncio contrasta con las declaraciones del embajador israelí en la ONU, Danny Danon, quien afirmó que Israel busca una solución diplomática para evitar una invasión. Sin embargo, el terreno parece estar preparado para una escalada militar, con contrarreloj en los pasillos de Naciones Unidas para detener la crisis. En Líbano, la situación es crítica, con al menos 558 muertos y decenas de miles de desplazados tras los bombardeos israelíes del lunes, marcando la jornada más sangrienta desde 1975. Israel justifica su operación por los continuos ataques con cohetes de Hizbulá, aumentando la tensión desde el 8 de octubre en respuesta a la masacre del 7 de octubre perpetrada por Hamás en Gaza.
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