Hace 30 años, el 16 de junio, se estrenó en el país Antes de amanecer, una película que capturó la esencia de un romance espontáneo entre dos desconocidos en Viena. La historia, centrada en los personajes Céline y Jesse, interpretados por Julie Delpy y Ethan Hawke, resonó profundamente con la Generación X y generó dos secuelas. Sin embargo, el director y guionista Richard Linklater imbuyó en esta narrativa una tragedia personal: el romance que inspiró la película se basaba en un encuentro efímero y no resuelto con una mujer llamada Amy Lehrhaupt, que tuvo un trágico destino.
El vínculo entre Linklater y Lehrhaupt se remonta a un encuentro fortuito en 1989 en Filadelfia, donde compartieron momentos en un café sin saber que jamás volverían a verse. Aunque la relación fue fugaz, dejó una huella emocional profunda en Linklater, quien soñó con plasmar esa experiencia en el cine. Lamentablemente, años después, su amigo le comunicó que Amy había fallecido en un accidente de tráfico, lo que llevó a Linklater a rendir homenaje a su memoria en Antes del anochecer, incluyendo una dedicatoria que subraya el impacto de esa conexión perdida en su obra cinematográfica.
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