El primer ministro de Qatar, Mohamed bin Abdulrahman, ha denunciado el reciente ataque israelí en Doha como un golpe devastador para las esperanzas de liberar a los 48 rehenes en Gaza. En una entrevista con CNN, Abdulrahman expresó su indignación, calificando el ataque como «terrorismo de Estado» y una traición a la soberanía de Qatar. Este incidente ocurrió cuando Israel atacó un edificio residencial, buscando eliminar a negociadores de Hamás en el marco de una propuesta de alto el fuego. Aunque los negociadores no fueron alcanzados, el ataque resultó en la muerte de cinco miembros de Hamás y un policía catarí, complicando las ya tensas conversaciones mediadas por Qatar, Egipto y Estados Unidos.
El ministro catarí enfatizó su decepción hacia el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y abogó por que comparezca ante el Tribunal Penal Internacional por violaciones a la ley internacional. Abdulrahman advirtió que las posibilidades de un alto el fuego se han erosionado significativamente, y vigentes reuniones con líderes de Oriente Próximo sugieren una posible «respuesta colectiva» en la región. Una cumbre árabe-islámica está planeada en Doha para definir próximos pasos, mientras Qatar reconsidera su rol mediador y consulta con Estados Unidos para definir una estrategia futura.
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