La Dirección General de Tráfico (DGT) ha iniciado la segunda fase de la Operación Salida de Semana Santa, un dispositivo que se extenderá desde este miércoles hasta el lunes 21 de abril. Durante este periodo, se estiman más de 9 millones de desplazamientos, cifra que representa un incremento del 3,5% respecto al año anterior. Para gestionar este flujo vehicular, la DGT ha implementado medidas especiales en las carreteras de alta densidad, incluyendo la habilitación de carriles adicionales y la suspensión temporal de obras. Además, se han dispuesto más de 5.600 agentes de la Guardia Civil para intensificar los controles de velocidad, alcohol y drogas, con el fin de reducir la siniestralidad vial y evitar que se repitan las muertes del año pasado, cuando 27 personas perdieron la vida en accidentes de tráfico.
El operativo se desarrollará a lo largo de varias jornadas, con especial atención a las tardes y a los momentos de mayor congestión, como la salida de las ciudades y el retorno durante las festividades. Este miércoles se prevé un aumento del tráfico en la mayoría de las comunidades autónomas, exceptuando Cataluña y la Comunidad Valenciana, que se unirán al operativo el jueves. El fin de semana se anticipan complicaciones en las carreteras de acceso a destinos vacacionales, y el domingo será un día clave para el inicio del retorno, con alta densidad de tráfico en zonas turísticas. El lunes, que continuará siendo festivo en cinco comunidades, se esperan retenciones significativas en las principales vías, señalando la culminación del operativo con medidas especiales para gestionar el flujo de regreso.
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