Javier «Chicharito» Hernández, reconocido futbolista mexicano, ha generado polémica tras la publicación de una serie de videos en las redes sociales donde comparte mensajes que han sido catalogados como machistas. En estos clips, el delantero de las Chivas de Guadalajara insta a las mujeres a «aprender a recibir y honrar la masculinidad», afirmando que ellas están «fracasando» y colaborando en la erradicación de la masculinidad. Estos comentarios han avivado críticas al alinearse con movimientos conservadores recientes, como el «redpill». Usuarios en redes sociales y expertos han señalado que estos mensajes no solo resultan ofensivos, sino que también perpetúan roles de género tradicionales que son considerados obsoletos y dañinos.
El impacto de las declaraciones de Hernández trasciende lo deportivo, situándolo en el centro de un debate sobre masculinidad y roles de género. Críticos sugieren que su asociación con figuras como Diego Dreyfus, conocido por su enfoque de autoayuda dirigido a hombres, ha influido en su reciente inclinación hacia estos discursos. Dreyfus, junto con otros «influencers» en México, ha sido señalado por promover ideas que, bajo el manto de empoderamiento, reproducen ideologías misóginas. Un informe de la Universidad Iberoamericana advierte sobre la proliferación de estos discursos en plataformas digitales y su potencial para alimentar discursos de odio y violencia de género, señalando una preocupante tendencia en la radicalización de jóvenes hacia estas ideas conservadoras.
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