Las intensas lluvias que han azotado el este de España, específicamente la Comunidad Valenciana y Cataluña, han causado demoras significativas en el transporte ferroviario y aéreo. Los trenes de alta velocidad y cercanías experimentaron retrasos considerables, superando los 40 minutos en algunos casos, debido a problemas en la infraestructura causados por la acumulación de agua y las inspecciones de las vías. La línea C-6, que conecta Valencia con Castellón, se vio particularmente afectada por una incidencia en Almenara, complicando la reanudación del servicio a pesar de los esfuerzos del personal técnico de Adif y Renfe para restablecer la normalidad lo más pronto posible.
Además, el tráfico aéreo también se ha visto trastocado, con la cancelación de cuatro vuelos en el Aeropuerto de Valencia debido a las malas condiciones meteorológicas. Las previsiones para el día indican fuertes tormentas en el arco mediterráneo, lo que podría implicar más regulaciones de tráfico aéreo por motivos de seguridad. La Aemet ha mantenido avisos rojos por lluvias torrenciales, con efectos en diferentes carreteras de Tarragona y Castellón, donde múltiples vías han sido cerradas. Esta situación de emergencia meteorológica afecta ampliamente a la movilidad de la región y a la planificación de los ciudadanos y turistas en el área.
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