El Ayuntamiento de Madrid ha aprobado en el Pleno el nuevo plan urbanístico con los votos favorables del Partido Popular (PP), Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y Vox, mientras que Más Madrid ha manifestado su rechazo. Esta aprobación se da en el marco de un debate intenso sobre el futuro del suelo público en la capital. Rita Maestre, portavoz de Más Madrid, ha criticado duramente la decisión, calificando el modelo urbanístico como «fracasado» y ha insistido en la necesidad de «blindar el suelo público» para evitar su privatización y garantizar el acceso a vivienda pública.
El respaldo de tres de los principales partidos políticos muestra una amplia coalición a favor del plan, pese a las objeciones de la oposición de izquierda. Este nuevo esquema urbanístico pretende modernizar la infraestructura de la ciudad y fomentar el desarrollo económico, pero enfrenta críticas por el posible impacto negativo en el acceso a vivienda asequible. Mientras el PP, PSOE y Vox defienden la viabilidad y beneficios del proyecto, los detractores advierten sobre los riesgos de fomentar la especulación inmobiliaria y reducir el espacio disponible para proyectos públicos esenciales.
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