La alcaldesa de Chiva, Amparo Fort, ha emitido un preocupante comunicado tras el devastador paso de la DANA en la región de Levante, expresando su temor de que haya «centenares de muertos» en su municipio debido a las riadas que han arrastrado vehículos y causado una gran destrucción. La situación en Chiva es crítica, con una población sin electricidad, agua potable ni alimentos básicos, lo que ha llevado a la alcaldesa a realizar un llamado urgente para recibir ayuda. Fort exige el suministro inmediato de agua potable, la reparación de una avería eléctrica y la provisión de víveres esenciales, incluidos potitos de bebés y pañales, para los residentes que se encuentran en estado de emergencia.
La situación se agrava con la necesidad de una ambulancia medicalizada y la amenaza de más víctimas mortales, ya que hasta ahora solo se han contabilizado diez fallecidos, pero el municipio es extenso y muchos vehículos volcados podrían contener personas atrapadas. Además, la alcaldesa ha informado del desalojo de cuatro edificios por riesgo de derrumbe y ha expresado su preocupación por el aumento del pillaje y robos en fábricas locales. Begoña Navarro, residente de Chiva, describe un escenario caótico donde la escasez de agua, luz y gas se suma a la falta de cobertura móvil y supermercados vacíos, tras haberse registrado una histórica caída de 491 litros de agua por metro cuadrado en solo ocho horas, desbordando el barranco que cruza la localidad.
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