En un ataque en Krivi Rih, ciudad natal del presidente ucraniano Volodímir Zelenski, se ha incrementado a cuatro el número de muertos y más de 30 los heridos tras el impacto de un misil ruso contra un hotel que albergaba voluntarios de una organización humanitaria, incluyendo ciudadanos estadounidenses y británicos. Según informó Zelenski este jueves, el ataque se realizó con un misil balístico y no con drones, lo que ocasionó graves daños no solo al hotel sino también a varios edificios civiles circundantes. Entre los heridos, que han recibido atención médica, el desastre pudo haber sido mayor de no ser porque los voluntarios lograron evacuar sus habitaciones a tiempo, como indicó Zelenski a través de la red social X.
Asimismo, el presidente ha lamentado las muertes y enviado sus condolencias a las familias afectadas, mientras sigue activa la operación de rescate en la zona durante toda la noche, con los equipos de emergencia trabajando arduamente. Zelenski ha subrayado la importancia de mantener la presión sobre Rusia para detener lo que califica como un terrorismo en curso contra la vida. En un contexto más amplio, las autoridades ucranianas también han informado de los fallecimientos de otras dos personas en ataques adicionales perpetrados por las fuerzas rusas en las provincias de Járkov y Sumi, situadas en el noreste de Ucrania, mostrando así la continuidad de la violencia en diferentes puntos del país.
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