En la era digital actual, la seguridad de nuestras redes Wi-Fi es crucial y el protocolo WPA3 se presenta como una herramienta esencial para proteger nuestras conexiones. Este protocolo, introducido en 2018, encierra múltiples innovaciones diseñadas para contrarrestar amenazas de ciberseguridad y fortalecer la protección de contraseñas y sistemas de cifrado.
WPA3, la tercera versión del Wi-Fi Protected Access, nació para superar las vulnerabilidades descubiertas en su predecesor, WPA2. Desde su primera versión en 2003, el protocolo ha evolucionado significativamente para garantizar que los datos transmitidos por redes Wi-Fi permanezcan privados y seguros, ya sea en comunicaciones cotidianas, transacciones bancarias o compras en línea.
Una de las características más destacadas de WPA3 es el modo Simultaneous Authentication of Equals (SAE), que refuerza la resistencia frente a diversos tipos de ataques, incluyendo aquellos que explotan contraseñas débiles. SAE proporciona una robusta protección contra ataques de diccionario durante la fase de autenticación, mejorando así la seguridad general de la red.
El cifrado de 192 bits que emplea WPA3 se combina con la Autenticación Simultánea de Iguales y el cifrado de flujo de datos individualizado, haciéndolo mucho más resistente a los ataques de fuerza bruta. Esto significa un mayor desafío para los criminales que intenten interceptar o descifrar el tráfico de la red.
WPA3 introduce varias mejoras sobre WPA2. Una de ellas es el cifrado individualizado para cada dispositivo (OWE), que protege las comunicaciones entre el punto de acceso y cada aparato conectado, incluso cuando se usan contraseñas más vulnerables. También se ha fortalecido la seguridad en redes públicas, dificultando los ataques de reenvío Man-in-the-Middle y protegiendo mejor contra la suplantación y los intentos de desconexión forzosa.
Para configurar el protocolo WPA3 en un router, es fundamental asegurar que el dispositivo sea compatible. Para ello, consulte la información del fabricante. Posteriormente, acceda a la configuración del router mediante un navegador web, generalmente ingresando la dirección IP del router (por ejemplo, 192.168.1.1 o 192.168.0.1). Una vez dentro, con el nombre de usuario y contraseña, que pueden venir preconfigurados como «admin» o «1234», entre otros, busque la sección de configuración inalámbrica. Allí, seleccionará WPA3 (como WPA3-Personal o WPA3-Enterprise) y guardará los cambios. Finalmente, reinicie el router para que los cambios surtan efecto.
En caso de problemas o dudas sobre ciberseguridad, el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) ofrece asistencia gratuita a través de su Línea de Ayuda en el número 017, así como a través de WhatsApp (900 116 117) y Telegram (@INCIBE017).
Este contenido se ha realizado en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España, financiado por la Unión Europea (Next Generation).