El tetracampeón de Fórmula 1 reflexionó sobre los desafíos enfrentados durante la temporada, reconociendo que en un 70% de las carreras, su equipo no contaba con el coche más rápido en la pista. A pesar de esta desventaja técnica, la habilidad y experiencia del piloto fueron cruciales para mantener un desempeño competitivo y consistentemente presionar a sus rivales. Este escenario evidencia su destreza y capacidad para adaptarse a circunstancias adversas, lo que refuerza su reputación en el mundo del automovilismo.
Desde Red Bull, la escudería no ha tardado en expresar su admiración por el piloto, describiéndolo como «uno de los más grandes de la historia». Esta afirmación no solo subraya su talento y logros pasados, sino que también cimenta su legado en el deporte, destacándose en un entorno altamente competitivo. El reconocimiento del equipo refleja la profunda conexión y respeto mutuo desarrollado a lo largo de los años, donde el piloto ha sido parte integral de su éxito y evolución en la Fórmula 1.
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