La Universidad de Pensilvania (Upenn) ha decidido vetar la participación de atletas transgénero en deportes femeninos, una acción en respuesta a la investigación iniciada durante la administración de Donald Trump sobre la nadadora Lia Thomas. Esta decisión se enmarca en las acusaciones del Departamento de Educación, que alegó que la universidad había violado los derechos civiles al permitir que una atleta transgénero compitiera en categorías femeninas. Como consecuencia de la investigación, el gobierno federal había congelado 175 millones de dólares en subvenciones relacionadas con el Título IX, que prohíbe la discriminación sexual en instituciones educativas.
En su comunicado, Upenn subrayó que se alinea con la interpretación actual del Título IX y las políticas de la NCAA, limitando la definición de sexo a masculino o femenino. El Departamento de Educación ha anunciado que restaurará los títulos a las atletas femeninas que fueron ocupados indebidamente por competidoras asignadas como hombres. La secretaria de Educación, Linda McMahon, calificó la medida como una «victoria para las mujeres y las niñas», mientras que algunas exnadadoras universitarias también expresaron su apoyo a estas nuevas regulaciones.
Leer noticia completa en 20minutos.