La institución académica, en colaboración con la empresa Qwello, ha anunciado la instalación de la mayor infraestructura eléctrica en el ámbito educativo. Este proyecto se centra en la implementación de ‘hubs’ de carga, que aunque son económicos y de carga lenta, buscan incentivar el uso entre los jóvenes. La iniciativa se presenta como un paso significativo hacia la sostenibilidad y la innovación tecnológica en el sector educativo, con el objetivo de integrar prácticas ecológicas en el día a día de los estudiantes.
Esta colaboración resalta la importancia de promover el uso de vehículos eléctricos y herramientas tecnológicas verdes entre las nuevas generaciones. Al elegir una tecnología de carga más accesible, se espera que los alumnos adopten estas prácticas con mayor facilidad. La estrategia no solo se centra en el aspecto ambiental, sino también en educar y preparar a los jóvenes para enfrentar los desafíos energéticos del futuro.
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