En una nueva oleada de ataques, el ejército israelí ha lanzado bombardeos que han dejado al menos 38 muertos en la Franja de Gaza, según las autoridades locales, aunque la cadena Al Jazeera reporta que la cifra podría ascender a 50. Los ataques se han concentrado en la ciudad de Gaza y en Deir al Balah, usando aviones de guerra y drones. En el campo de refugiados de Nuseirat y Deir al Balah se han registrado la mayoría de las víctimas. Además, un ataque con dron en el área de Al Manara, cerca de Jan Yunis, ha resultado en la muerte de dos palestinos. A su vez, el ejército israelí ha ordenado el desalojo de dicha ciudad, instando a los residentes a moverse hacia la costa en un intento de reducir bajas civiles.
Estos ataques ocurren justo después de que Israel autorizara de manera limitada el ingreso de ayuda humanitaria. Solo nueve camiones con suplementos nutricionales para niños pudieron ingresar en el territorio en el día anterior, a través del paso de Kerem Shalom. Con esto, el primer ministro Benjamín Netanyahu busca mitigar la presión internacional ante la creciente crisis humanitaria en Gaza, donde la ONU estima que al menos 71.000 niños necesitan tratamiento urgente por malnutrición aguda. La situación sigue siendo precaria, agravada por la continua violencia y los escasos recursos disponibles para la población afectada.
Leer noticia completa en El Pais.