El presidente de Estados Unidos afirmó que el país está en una posición económica favorable, lo que elimina cualquier justificación para no alcanzar el gasto del 5% del PIB en Defensa, como se comprometió en el acuerdo con la Alianza. En declaraciones recientes, subrayó que la fortaleza económica actual debería permitir cumplir con los compromisos internacionales sin dificultades significativas. La declaración llega en un contexto donde algunos países miembros de la Alianza han enfrentado críticas por no aumentar suficientemente su gasto en defensa a pesar de los compromisos adquiridos.
Este comentario refuerza la posición de Estados Unidos de que es crucial que los países miembros cumplan con sus obligaciones de defensa para garantizar la seguridad colectiva. La cuestión del gasto militar ha sido un tema recurrente en las discusiones de política internacional, especialmente en una época de crecientes tensiones globales. La insistencia del presidente en este punto refleja la importancia para su administración de que todos los miembros contribuyan equitativamente al esfuerzo de defensa común.
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