Donald Trump ha decidido reanudar la ayuda militar a Ucrania en su conflicto contra Rusia, tras alcanzar un acuerdo con Kiev sobre la explotación de tierras raras. A pesar de que el parlamento ucraniano aún no ha aprobado el pacto, EE.UU. ha autorizado la exportación de 50 millones de dólares en equipo y servicios de defensa. Anteriormente, Trump había suspendido el envío de armas para presionar por un acuerdo con Ucrania respecto a sus minerales. El Congreso estadounidense ha expresado su disposición a apoyar esta medida, aunque su impacto en las negociaciones de paz parece ser negativo.
El vicepresidente J. D. Vance considera improbable una resolución rápida del conflicto. Washington ahora se distancia del rol de mediador, mientras la Casa Blanca podría implementar sanciones más estrictas contra Moscú. A pesar de su reluctancia pasada a presionar a Putin, Trump podría enfrentar su posición con mayor firmeza gracias al acuerdo sobre minerales. El secretario del Tesoro, Scott Bessent, resaltó el compromiso con Ucrania como una señal poderosa para Rusia, potencialmente fortaleciendo la postura negociadora de Trump. Además, el acuerdo permite inversiones europeas en Ucrania, sin obstaculizar su integración en la UE.
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