En un intercambio marcado por la retórica agresiva, los líderes se lanzaron burlas luego de que Trump anunciara que Rusia tenía un plazo de diez días para acordar un alto el fuego en el conflicto ucraniano. Esta declaración, realizada el martes, ha intensificado las tensiones entre ambas naciones, generando una serie de respuestas diplomáticas y críticas en el ámbito internacional. La afirmación de Trump fue percibida como un intento de ejercer presión sobre Moscú, en medio de un panorama geopolítico ya complejo y cargado de incertidumbre.
En respuesta, las autoridades rusas emitieron comentarios despectivos subrayando la falta de influencia de Trump en la situación actual. Además, el intercambio de declaraciones ha sido objeto de una atención mediática considerable, poniendo de relieve la pugna política que subyace entre las dos potencias. La comunidad internacional observa con atención el desarrollo de estos eventos, que podrían influir en los próximos movimientos diplomáticos para resolver la situación en Ucrania.
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