Este viernes, los técnicos José Mourinho y Pep Guardiola avivaron viejas tensiones entre ambos en las ruedas de prensa previas a sus respectivos partidos en Turquía e Inglaterra. Tal enfrentamiento, que parecía haber terminado cuando Mourinho dejó el Real Madrid y el Manchester United, y Guardiola continuó su trayectoria desde el Barcelona y el Manchester City, ha revivido tras el polémico gesto del entrenador catalán hacia la grada de Anfield. En un contexto donde el Manchester City busca redimirse tras una serie de fracasos, culminando en una dolorosa derrota en Anfield, y mientras se preparan para enfrentar al Crystal Palace, Guardiola fue interrogado sobre los cánticos de la afición de Liverpool que anticipaban su despido. A pesar de haber retomado el vuelo con una reciente victoria sobre Nottingham Forest, la presión sobre Guardiola es evidente, máxime tras haber renovado recientemente su contrato.
En respuesta a las comparaciones con Mourinho, debido a un gesto simbólico del pasado del portugués mientras entrenaba al Manchester United, Guardiola apeló a la ironía y afirmó que ambos comparten experiencias similares en la Premier League, enfatizando sus respectivos logros. Mourinho, no obstante, no tardó en responder de manera contundente a través de declaraciones en la web del Fenerbahce. Criticó implícitamente al City y recordó las irregularidades en su etapa, subrayando su deseo de ganar de forma limpia y justa, en contraposición a situaciones dudosas. El intercambio entre Mourinho y Guardiola no solo reaviva una rivalidad histórica, sino que también subraya las controversias que rodean al Manchester City en la actualidad.
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