En una ceremonia sin precedentes, los Premios Goya 2025 concluyeron con un final histórico, al otorgar el máximo galardón de la noche a dos películas en la categoría de Mejor Película. «El 47», dirigida por Marcel Barrena, y «La infiltrada», de Arantxa Echevarría, compartieron el honor de forma ex aequo, sorprendiendo al público presente en la gala celebrada en Granada. La decisión, anunciada por la actriz Belén Rueda, dejó atónita a la audiencia al explicar que ambas producciones habían empatado en votos, marcando un momento inédito en la historia de los premios. Esta situación no es completamente extraña en otros apartados de los Goya, pero sí es la primera vez que sucede en la principal categoría.
Durante la premiación, los equipos de las películas se mostraron visiblemente emocionados al recibir el reconocimiento. Marcel Barrena, al frente de «El 47», destacó la esencia de su obra como un tributo a la bondad, inspirado en la comunidad del barrio de Torre Baró en Barcelona. Mientras tanto, Arantxa Echevarría expresó su gratitud y alegría por el éxito alcanzado con «La infiltrada», una cinta que combina intriga y resonancia social al narrar la experiencia de una policía infiltrada en la organización ETA. En un año notable para el cine español, otras producciones nominadas, como «Casa en llamas» de Dani de la Orden, «La estrella azul» de Javier Macipe, y «Segundo premio» de Isaki Lacuesta, también dejaron huella, cada una con su propuesta única, enriqueciendo la diversidad narrativa y temática de la cinematografía nacional.
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