El ambiente caluroso de El Retiro no impidió la inauguración de la 84.ª edición de la Feria del Libro de Madrid, un evento marcado por la llegada de la reina Letizia, quien se adentró en un recorrido entre casetas a las 11 de la mañana. Mientras la temperatura alcanzaba los 30 grados, la prensa fue informada más tarde de la alerta roja por condiciones meteorológicas adversas que obligarían al cierre del parque. Letizia, con su característico bolso en mano, se mostró accesible, saludando a libreros, escritores y políticos, mientras avanzaba por el recorrido cultural que se convirtió en un animado intercambio con el público, compuesto en su mayoría por escolares y jubilados.
Durante su visita, la Reina se detuvo a conversar acerca de diversos libros, entre los que destacaron obras de autores consagrados como Federico García Lorca y Ana María Matute. La jornada también incluyó momentos de diversión, como cuando Letizia se unió a niños en un taller de cómics, creando un ambiente distendido a pesar de las altas temperaturas. La inauguración culminó con reflexiones sobre la importancia de la lengua española, un legado compartido que, como resaltó un académico presente, debe ser valorado y protegido por todos. La Feria del Libro se presentó así como un espacio de encuentro y celebración literaria, a pesar de la ola de calor que acompañó a este evento anual.
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