Veinticuatro horas después de la histórica elección de León XIV, el Vaticano se encuentra en un ambiente de euforia y normalidad. Más de 40,000 fieles se congregaron en la Plaza de San Pedro para recibir la bendición del nuevo Papa, mientras la afluencia de turistas y devotos discute la trascendental noticia. Aunque las tradicionales cortinas rojas y la chimenea de la Capilla Sixtina aún dan cuenta del cónclave reciente, los controles de acceso se han relajado, permitiendo una mayor libertad en la plaza y los alrededores del Vaticano.
El primer día de papado de Robert Francis Prevost incluyó una misa en la Capilla Sixtina, celebrada en latín con lecturas en español e inglés y una homilía en italiano centrada en el compromiso pastoral de la Iglesia. La Santa Sede ha delineado una agenda intensa para los próximos días, que culminará con la misa de inicio oficial del papado el 18 de mayo, ocasión en la que se le otorgará el Anillo del Pescador. Mientras tanto, León XIV ya ha interactuado con la comunidad local y mantiene su residencia temporal en la Casa Santa Marta, dejando abierta la posibilidad de trasladarse al Palacio Apostólico, en un reflejo de su estilo de vida modesto.
Leer noticia completa en 20minutos.