La Comisión Local de Patrimonio Histórico (CLPH) de la Comunidad de Madrid ha dado luz verde al proyecto de rehabilitación y mejora de la antigua fábrica de Clesa, ubicada en Fuencarral-El Pardo. En la reunión del 17 de julio, la comisión concluyó que el proyecto cumple con la declaración del edificio como Bien de Interés Cultural (BIC), en la categoría de monumento, aprobada por el Gobierno regional en marzo pasado. Este dictamen fue ratificado el 19 de julio por la Dirección General de Patrimonio Cultural y Oficina del Español de la Comunidad de Madrid, organismo encargado de la protección del patrimonio de los edificios que tienen o están en proceso de declaración como BIC.
Con esta aprobación, se completa un proceso crucial para garantizar la preservación del patrimonio arquitectónico de este edificio, significante para Madrid, que estaba en estado de abandono desde 2012. Esta medida marca un paso importante hacia la recuperación y puesta en valor del edificio y su entorno, ahora cedido al Ayuntamiento.
El proyecto prevé la transformación de la antigua fábrica en un centro de innovación e investigación, respetando su carácter histórico y adaptándolo a nuevas funcionalidades. La propuesta, elaborada por la empresa Kadans Science, fue seleccionada en el concurso internacional Reinventing Cities de 2019.
Las obras comenzarán con el acondicionamiento general del inmueble, respetando la distribución de las naves principales y recuperando los espacios originales. También se contemplan nuevas distribuciones internas para adaptarse a los nuevos usos, y se intentará utilizar materiales originales siempre que sea posible.
Además, se realizarán ampliaciones subterráneas para incluir estacionamientos y otras ampliaciones en la tercera planta del edificio de laboratorios y en la pasarela de conexión. Serán necesarias reestructuraciones puntuales para cumplir con las normativas de incendios y seguridad, incluyendo la creación de escaleras y pasarelas de evacuación, la instalación de ascensores para mejorar la accesibilidad y la apertura de huecos en forjados para proporcionar luz a la planta sótano.
También se fortalecerá y acondicionará la estructura del edificio mediante refuerzos, y en las cubiertas se realizarán trabajos de conservación e impermeabilización, además de la instalación de paneles fotovoltaicos. Se incluirán cubiertas verdes extensivas y se llevarán a cabo obras de conservación en las fachadas, manteniendo las piezas originales y sustituyendo las carpinterías.
El proyecto también incluye la renovación y mejora del entorno, reduciendo el tamaño del terreno original de la fábrica y creando una gran zona verde con nuevos viales. El resto de las parcelas se destinarán a servicios terciarios con actividades sociales, culturales y educativas para los vecinos de Fuencarral-El Pardo.
La antigua fábrica Central Lechera Clesa, diseñada por el arquitecto Alejandro de la Sota, es un edificio de alto valor arquitectónico, histórico y social. Operativa hasta 2011, cerró definitivamente en 2012 tras la quiebra de su propietario.
En 2015 se inició la modificación del Plan General de Ordenación Urbana de Madrid para crear una nueva centralidad urbanística, incluyendo la edificación principal en el Catálogo de Edificios Protegidos. Aunque este plan fue abandonado, en 2018 se reanudó el proceso, que fue aprobado definitivamente en 2020. Este plan de 2020 estableció la cesión del edificio al Ayuntamiento de Madrid y preservó la volumetría y los elementos arquitectónicos más destacados de la fábrica en el Catálogo de Edificios Protegidos (Nivel 3 grado parcial).
Antes de su cesión, algunas partes de la nave no protegidas fueron demolidas y se llevaron a cabo reparaciones mínimas para evitar el deterioro del inmueble. El proyecto de urbanización de la zona verde alrededor de la fábrica fue aprobado de manera definitiva en 2022.
