Una interiorista renombrada, con años de experiencia a sus espaldas, ha compartido recientemente sus consejos sobre qué elementos evitar al diseñar el salón de casa, así como aquellos que considera imprescindibles para un espacio armonioso y funcional. Este enfoque provee una guía útil para todos aquellos que buscan renovar o mejorar la estética de su lugar de reunión familiar.
En su análisis, destaca que el mobiliario desproporcionado es uno de los errores más comunes. Un sofá o una silla excesivamente grandes pueden acaparar el espacio, haciendo que este se sienta claustrofóbico, especialmente en salones más pequeños. La clave, según la experta, está en elegir muebles que conjuguen comodidad y una escala apropiada al tamaño de la habitación.
El uso de tonos oscuros en las paredes es otro desacierto que resalta. Aunque pueden aportar un toque de sofisticación, estos colores tienden a hacer que los espacios se perciban más pequeños y menos acogedores, algo crucial a evitar en un salón. Optar por una paleta de colores claros y neutros permite aprovechar mejor la luz, proporcionando una sensación de amplitud y frescura.
Las alfombras mal dimensionadas son el tercer elemento a evadir. Una alfombra demasiado pequeña puede romper la armonía visual, mientras que una demasiado grande puede dominarlas precipitadamente. Lo ideal es seleccionar una que se ajuste de manera adecuada al área del mobiliario, logrando un equilibrio estético.
La iluminación es otro factor crucial mencionado. Una sola fuente de luz no es suficiente para crear un ambiente agradable. Se recomienda una combinación de diversas fuentes de iluminación, como luces de techo, lámparas de pie y apliques, que permitan ajustar el ambiente según la actividad o el estado de ánimo.
Por último, advierte sobre la saturación decorativa. El exceso de objetos puede provocar un caos visual, restando tranquilidad al espacio. La selección cuidadosa de algunas piezas decorativas que verdaderamente complementen y enriquezcan el entorno es fundamental.
En cuanto a los elementos imprescindibles, la experta subraya la importancia de un buen asiento. La comodidad es primordial, por lo que sofás y sillones de calidad son una inversión que pagará dividendos en términos de bienestar y disfrute.
Un punto focal en el salón es esencial para crear cohesión visual y dirigir la mirada, ya sea una chimenea, una obra de arte o una ventana con vista al exterior. Este elemento actúa como un ancla para el resto de la decoración y el mobiliario.
El verde también juega un papel importante. Uno o dos toques de naturaleza, como plantas de interior, no solo revitalizan el espacio, sino que también mejoran la calidad del aire del salón.
El almacenamiento inteligente es otro de los pilares fundamentales. Muebles multifuncionales que proporcionen solución de almacenamiento permiten mantener el orden sin comprometer el diseño y la estética del lugar.
Finalmente, la personalización se erige como el toque final imprescindible. Los elementos que reflejen la personalidad y la historia de los habitantes, como fotografías, libros o recuerdos de viajes, añaden calidez y autenticidad al espacio.
Siguiendo estos consejos, es posible transformar cualquier salón en un refugio de confort y estilo, perfecto para relajarse y socializar con amigos y familiares.