El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, acusó a Rusia de llevar a cabo un «asesinato deliberado de civiles» en el contexto del conflicto armado entre ambos países. En sus declaraciones, urgió a la comunidad internacional a intensificar la presión sobre Moscú para detener «la matanza» y poner fin a las hostilidades que afectan principalmente a la población civil. Esta situación ha generado una fuerte respuesta global y una creciente demanda de medidas diplomáticas más severas contra el gobierno ruso.
Las tensiones entre Ucrania y Rusia han escalado en las últimas semanas, con informes de ataques dirigidos a áreas residenciales y civiles. La comunidad internacional observa con preocupación el deterioro de la situación humanitaria en la región, mientras se multiplican los llamados a reforzar las sanciones y buscar una solución pacífica. Zelenski reafirmó su compromiso de seguir luchando por la seguridad y los derechos de los ucranianos, insistiendo en la necesidad de una acción internacional concertada para frenar la agresión.
Leer noticia completa en El Mundo.