En La Haya, al menos cuatro personas perdieron la vida y tres resultaron heridas debido a una explosión que arrasó un bloque de apartamentos en el barrio de Tarwekamp durante la madrugada del sábado. El incidente, que ha dejado cinco viviendas destruidas y partido en dos un edificio de tres pisos de altura, generó una rápida respuesta de los bomberos, quienes tardaron cuatro horas en extinguir el incendio. La policía local investiga la posibilidad de que la explosión haya sido deliberada, buscando pistas sobre un vehículo que fue visto alejándose velozmente de la escena alrededor de las 6:15 a.m. Mientras tanto, equipos de rescate operan bajo un «código 20», lo que sugiere la posible presencia de más de veinte víctimas aún atrapadas bajo los escombros.
El alcalde Jan van Zanen ha expresado su profunda preocupación ante lo que calificó como «el peor de los escenarios posibles», al tiempo que la ciudad se encuentra en alerta máxima. Los servicios de emergencia trabajan incansablemente para rescatar a los posibles sobrevivientes y garantizar la seguridad en la zona. Van Zanen ha emitido una orden de emergencia para facilitar las labores de los efectivos, permitiéndoles operar sin interrupciones hasta el próximo lunes. La comunidad local, conmocionada por el incidente, aguarda nuevas informaciones sobre las causas del trágico suceso mientras se intensifican los esfuerzos de recuperación y asistencia a los afectados.
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