En la madrugada del miércoles, un incendio se desató en una residencia de ancianos en el centro de Madrid, lo que obligó a los bomberos a actuar rápidamente para evacuar a los residentes. Debido a la rápida propagación de las llamas, los bomberos se vieron obligados a romper varias ventanas para facilitar la salida de los ancianos. La operación de rescate fue compleja debido a la avanzada edad de los residentes, muchos de los cuales presentan movilidad reducida. Afortunadamente, todos lograron ser evacuados sin reportar heridos graves, aunque varios tuvieron que ser atendidos por inhalación de humo.
Las autoridades informaron que el incendio pudo haberse originado en una de las cocinas, aunque la investigación sigue en curso para determinar la causa precisa. Hasta el momento, los residentes han sido reubicados temporalmente en otras instalaciones mientras se realiza una evaluación detallada de los daños estructurales del edificio. La rápida respuesta de los bomberos y el personal de emergencia fue clave para evitar víctimas en un incidente que pudo haber tenido consecuencias fatales.
Leer noticia completa en El Mundo.