Al menos tres personas han muerto y 46 resultaron heridas en un ataque atribuido a las fuerzas israelíes contra civiles palestinos en un centro de distribución de ayuda humanitaria en Rafah, al sur de la Franja de Gaza. Según un comunicado del Gobierno gazatí, el ataque se considera una «masacre», señalando que las fuerzas israelíes dispararon munición real contra «civiles hambrientos» que esperaban recibir asistencia, gestionada por la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF). Este hecho se enmarca en un contexto de más de 90 días de bloqueo y hambruna, que el Gobierno gazatí califica como parte de un «plan de genocidio y desplazamiento forzado.»
Este martes, se generó un caos en un punto de distribución de la GHF cuando cientos de personas saltaron las vallas para intentar acceder a la ayuda. La fundación tuvo que retirar a su equipo para garantizar la seguridad de los gazatíes presentes. Mientras el Ejército israelí admitió haber lanzado disparos de advertencia para dispersar a la multitud, negó haber disparado contra la población desde helicópteros. La GHF, creada por exmilitares estadounidenses, ha sido criticada por su falta de neutralidad, en medio de una grave crisis humanitaria que ha dejado más de 53,900 muertos y 123,000 heridos desde el inicio del conflicto.
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