Un trágico accidente aéreo se suscitó la noche del miércoles en Washington D.C., cuando un avión comercial colisionó con un helicóptero de la policía mientras se preparaba para aterrizar en el aeropuerto Ronald Reagan. El avión, un CRJ700 de la compañía PSA, filial de American Airlines, transportaba al menos a 60 personas y se aproximaba desde Wichita, Kansas. El impacto, cuyas causas aún son inciertas, provocó que la aeronave cayera en el río Potomac. Las autoridades desplegaron rápidamente un dispositivo policial en la zona del accidente para buscar cuerpos y posibles supervivientes, mientras un helicóptero de la policía sobrevolaba el área, rastreando entre las aguas del río.
La colisión obligó al cierre inmediato del aeropuerto Ronald Reagan, causando que muchos vuelos fueran desviados a aeropuertos cercanos, como el de Baltimore. La tragedia se produjo a las 20:53 horas locales y dejó a los pasajeros de otros aviones, como uno proveniente de Miami, en espera y expectantes al ser informados sobre el accidente en la pista. La respuesta de emergencia continúa, mientras investigadores intentan determinar las causas que llevaron al helicóptero policial a interponerse en la trayectoria descendente del avión. Esta catástrofe ha golpeado la tranquilidad aérea de la capital estadounidense, dejando a muchas familias pendientes del destino de sus seres queridos a bordo.
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