Un avión de pasajeros de Azerbaiyan Airlines se estrelló este miércoles cerca de Aktau, Kazajistán, mientras volaba de Bakú, Azerbaiyán, a Grozni, Rusia. El Embraer 190 llevaba a bordo 67 personas, incluidos 62 pasajeros y cinco tripulantes. Las autoridades kazajas confirmaron que al menos 25 personas sobrevivieron y están siendo atendidas en hospitales. Inicialmente se había mencionado que había 72 personas a bordo, pero el Ministerio kazajo de Emergencias ajustó la cifra. El accidente ocurrió cerca de la costa del mar Caspio, y algunos vídeos en redes sociales muestran el avión descendiendo bruscamente y estallando en llamas al impactar en una zona despejada.
Las investigaciones preliminares sugieren que el avión pudo haber colisionado con una bandada de pájaros, aunque también se señala que un fallo en el sistema de control podría haber causado el accidente. Antes del siniestro, el avión envió una señal de socorro aproximadamente a las 8.35 hora local debido a la espesa niebla que lo desviaba de su ruta original hacia Grozni. Solicitó un aterrizaje de emergencia en Aktau poco antes de que se estrella a las 9.30. La mayor parte de los pasajeros eran ciudadanos azerbaiyanos. El Ministerio de Emergencias ha confirmado que se produjo un incendio en el lugar del accidente, intensificando el ya trágico desenlace de este vuelo comercial.
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