Una inesperada proliferación de gallinas ha tomado los parques y zonas verdes de Torrevieja, Alicante, generando preocupación entre las autoridades locales y habitantes. Aunque el Ayuntamiento insiste en que estas aves no representan un peligro, se estima que hay alrededor de 700 ejemplares, lo que ha derivado en problemas sanitarios y de seguridad vial al cruzar carreteras concurridas como la N-332. Para abordar la situación, el consistorio lanzó una licitación para su captura y reubicación en santuarios, pero la empresa adjudicataria, Ecoplanín Xestión e Información Ambiental SL, renunció al proyecto, citando su incapacidad para cumplir con todas las exigencias, especialmente el transporte a santuarios, tal y como lo requiere la Ley de Protección Animal.
Las gallinas, que comenzaron a multiplicarse desde 2014 a partir de un grupo inicial de 40 en el parque Las Naciones, ahora se extienden por diversos puntos de Torrevieja. Mientras algunos vecinos se sienten molestos por el ruido y suciedad que generan, otros las consideran parte del paisaje urbano e incluso una atracción. Con el retiro de Ecoplanín, el Ayuntamiento debe considerar otras opciones entre las empresas que inicialmente no cumplieron con el estándar requerido, muchas de las cuales se especializan en exterminio, lo que está prohibido. El desafío sigue vigente, dividiendo a la comunidad entre quienes ven las aves como una molestia y quienes disfrutan de su peculiar presencia en la ciudad.
Leer noticia completa en El Pais.
