El líder insurgente sirio Ahmed al Charaa, conocido como Abu Mohamed al Julani, ha mantenido conversaciones en Damasco con el enviado especial de la ONU para Siria, Geir Pedersen, donde destacó la necesidad de crear un entorno seguro para facilitar el retorno de los refugiados al país. En las discusiones se subrayó la importancia de abordar cautelosamente las etapas de transición y la rehabilitación de las instituciones para establecer un sistema robusto y eficaz en la nueva Siria, que ya no está bajo el control de Bachar el Asad. Al Julani enfatizó, además, la relevancia de proporcionar apoyo económico y político para asegurar estas condiciones, en un esfuerzo por lograr la estabilidad y prosperidad en la región.
Durante la reunión, también se abordó la revisión de la Resolución 2254 de la ONU, que desde 2015 ha buscado un proceso político liderado por los sirios y apoyado por la ONU para salir de la prolongada crisis. La resolución pide la formación de un gobierno legítimo y la redacción de una nueva Constitución. Con los recientes cambios políticos en Siria, se considera fundamental adaptar esta resolución a la nueva realidad. Mientras tanto, según la ACNUR, más de 6 millones de refugiados sirios permanecen desplazados principalmente en países vecinos, aunque desde el derrocamiento de Asad, miles han comenzado a regresar al país. Al Julani también resaltó la urgencia de trabajar por la unidad territorial, la reconstrucción y el desarrollo económico de Siria, tareas que requieren una planificación cuidadosa y especializada para asegurar su éxito.
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