El portero del Osasuna, Sergio Herrera, protagonizó un momento de preocupación durante el enfrentamiento de octavos de final de la Copa del Rey contra el Athletic Club, celebrado en San Mamés. En el minuto 82 del partido, Herrera sufrió un golpe en la cabeza tras un choque accidental con su compañero Boyomo, quien impactó su rodilla contra el guardameta. Aunque el portero intentó reincorporarse tras el golpe, terminó cayendo al suelo, conmocionado pero consciente, con una pequeña herida visible en la ceja.
La respuesta del equipo médico fue inmediata, ya que los servicios de salud del Osasuna recomendaron su sustitución del terreno de juego. Herrera fue retirado en una camilla móvil y Aitor Fernández ocupó su lugar en la portería. Al término del encuentro, el jugador fue transferido a la Clínica Universidad de Navarra para someterse a evaluaciones médicas, cuyos resultados aún no se han hecho públicos. La escena del incidente sembró momentánea incertidumbre entre los presentes y trajo un foco de atención adicional al emocionante partido.
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