Teleperformance, conocida como «la empresa de las personas», se encuentra en el centro de la controversia tras anunciar un despido colectivo que afecta a 321 trabajadores en seis de sus centros de telemarketing en España. La compañía, que emplea a unas 7000 personas a nivel nacional, justifica esta medida por la pérdida de las campañas de Vodafone NLM y Verisure, y alega la imposibilidad de recolocar al personal afectado en otras campañas, pese a su amplio abanico de clientes en sectores como telefonía, energía, banca y entretenimiento.
Desde el 30 de mayo, se lleva a cabo una negociación del ERE que, según la CGT, está viciada por la manipulación del alcance del despido. El sindicato acusa a Teleperformance de incluir centros de trabajo no afectados por las campañas mencionadas para diluir la influencia del sindicato en las negociaciones. CGT está explorando acciones legales para declarar nula la medida, denunciando lo que considera una maniobra injusta y perjudicial para los trabajadores.
Las críticas se intensifican con movilizaciones y asambleas organizadas por el sindicato, que defiende la capacidad de la empresa para mantener a todo el personal actual. Argumentan que la reducción de costos mediante el despido y la deslocalización a países con peores condiciones laborales no solo es éticamente cuestionable, sino que va en contra de la estabilidad laboral y la calidad de vida de los empleados.
El sector del telemarketing, caracterizado por su alta feminización y condiciones laborales precarias, se enfrenta nuevamente a un desafío. Con jornadas mayoritariamente parciales y salarios apenas al nivel del SMI, el impacto de esta medida amplifica las preocupaciones sobre la dignificación del sector.
La CGT reafirma su compromiso en la lucha por mejorar las condiciones del telemarketing, destacando el trabajo esencial de sus empleados y su indispensable papel en el mercado laboral. Bajo el lema «¡LOS PUESTOS DE TRABAJO NO SE VENDEN, SE DEFIENDEN!», continúan resistiendo los cambios propuestos por la empresa, que consideran una traición a los valores que Teleperformance declara representar.
Fuente: CGT