Los principales accionistas del grupo, entre los que se incluyen Sepi, Criteria Caixa y STC, se verán afectados significativamente al dejar de percibir aproximadamente 85 millones de euros cada uno en el transcurso de dos años. Este impacto financiero refleja la situación actual del grupo, que está enfrentando desafíos económicos considerables. La pérdida de estos ingresos para los accionistas se suma a un contexto financiero complicado, lo que podría influir en las decisiones futuras de inversión y en la estrategia organizativa.
La situación plantea interrogantes sobre la sostenibilidad a largo plazo del grupo y el impacto en sus operaciones futuras. A pesar de la adversidad, los accionistas principales tendrán que reevaluar sus posiciones y considerar alternativas para mitigar la pérdida financiera. Mientras tanto, el mercado estará atento a las medidas que implementen para contrarrestar estos desafíos económicos y proteger su valor accionarial.
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