Lydia Lozano ha sido contundente al expresar su alivio por la cancelación del programa «La familia de la tele», revelando que «estaba deseando que se acabase». En el pódcast «Me mola mazo», la periodista compartió su experiencia, advirtiendo a sus compañeros sobre las dificultades de trabajar en Televisión Española, donde las normas son más estrictas que en programas de otras cadenas. Aseguró que les había alertado sobre las limitaciones que enfrentaron, aunque estos no tomaron en cuenta su experiencia previa en «Mañaneros». Lozano describió la dinámica del programa como caótica, mencionando que sentía que estaban «como caballos desbocados».
La excolaboradora de «La familia de la tele» también se refirió a la intensa presión que vivió durante la grabación del programa, señalando que la «agonia» experimentada era superior a la que había sentido en otros formatos en los que había participado. Lozano cuestionó la compatibilidad del público de La 1 con el estilo de «Sálvame», y reconoció que tanto ella como su equipo cargan con un estigma en el medio. Su sinceridad sobre el ambiente laboral y las exigencias de la televisión pública resuena con los desafíos constantes que enfrentan muchos profesionales en el sector.
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