Pedro Sánchez ha anunciado una inversión de 40 millones de euros para fomentar el uso de bicicletas como alternativa al coche, dividida en 20 millones para la compra de bicicletas eléctricas y otros 20 millones para desarrollar sistemas de bicicletas públicas de alquiler. Esta medida se enmarca en una campaña para impulsar el transporte público y reducir el uso de vehículos de alta gama, como los Lamborghini, en la sociedad española. Sin embargo, la cuantía es inferior a la de otras administraciones, como el Ayuntamiento de Madrid, que ha destinado 48,8 millones al proyecto de transformación tecnológica y ampliación de BiciMad, financiados en parte por los fondos Next Generation de la Unión Europea. BiciMad ha alcanzado cifras récord en 2023, con 7.500 bicicletas eléctricas nuevas y 5.775.817 viajes, casi dos millones más que en el mejor año completo hasta ahora.
El presidente Sánchez ha destacado que en los últimos dos años el Gobierno ha invertido cerca de 2.000 millones de euros en transporte público, incluyendo la bonificación de billetes y programas de gratuidad para trenes de Cercanías y Media Distancia. Según el mandatario, estas medidas han sido clave para que los ciudadanos puedan llegar mejor a fin de mes. Sánchez ha defendido que el transporte público no es un capricho ideológico, sino una necesidad diaria para millones de ciudadanos, y ha subrayado la importancia de invertir en su mejora para fomentar su uso y reducir la dependencia del transporte privado. En una campaña del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, se ha lanzado un rap promocional que enfatiza los beneficios económicos y ambientales del transporte público, intentando conectar con los potenciales usuarios a través de un lenguaje coloquial.
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