Jannik Sinner se consagró campeón del Abierto de Nueva York tras vencer a Taylor Fritz en una final sin mayores sobresaltos (6-3, 6-4 y 7-5). El tenista italiano, muy emotivo, dedicó su triunfo a su equipo y a su tía enferma, subrayando la importancia de la fortaleza mental en momentos complejos. Con este resultado, Sinner suma ya dos títulos de Grand Slam y destaca por su regularidad y solidez en la temporada. A pesar de las circunstancias adversas, incluido un diagnóstico accidental de clostebol, Sinner se ha mantenido enfocado en su juego, demostrando un dominio impresionante en la pista dura. Taylor Fritz, en su primera gran final, no pudo superar la precisión del joven italiano, quien ha dejado clara su capacidad de competir al más alto nivel. La victoria en Nueva York confirma a Sinner como una de las principales figuras del tenis actual.
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