Simón Pérez y Silvia Charro, dos asesores financieros que ganaron notoriedad en 2017 por un polémico vídeo viral sobre hipotecas a tipo fijo, enfrentan una alarmante caída en su vida personal y profesional. El clip, en el que ambos aparecían visiblemente alterados, resultó en su despido y les costó hasta 600.000 euros en pérdidas laborales. Desde entonces, su existencia ha ido en declive, convirtiéndose en creadores de contenido online en medio de una creciente dependencia de sustancias. Recientemente, Charro reveló que esta situación ha llevado a Pérez a ingresar en un centro psiquiátrico de forma voluntaria, en un intento por buscar ayuda.
No obstante, la tregua parece haberse desvanecido, ya que sus transmisiones en la plataforma Kick han dejado entrever una situación aún más preocupante. En sus directos, se observa a Pérez consumiendo diversas sustancias y participando en retos confrontantes, como verter un cubo de vómito sobre su cabeza. A pesar de atraer a miles de espectadores que están dispuestos a pagar por su espectáculo degradante, su estado físico y mental se ha deteriorado visiblemente, generando preocupación acerca de su bienestar. La situación ha escalado hasta el punto en que se ha hecho un llamado urgente para que reciba ayuda profesional.
Leer noticia completa en 20minutos.