El ex presidente Barack Obama y su esposa Michelle impulsaron la candidatura de Kamala Harris en la Convención Nacional Demócrata en Chicago, donde destacaron la esperanza y valores familiares que comparten con ella. Michelle Obama denunció la división fomentada por Donald Trump, instando a votar contra él para proteger la democracia y derechos sociales. Barack Obama retrató a Trump como un quejoso y fanfarrón, enfatizando la necesidad de un liderazgo que promueva el bien común y vea a Harris como la solución. Ambos concluyeron con un mensaje de confianza: «Yes, she can».
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