Santi Denia dejó el estadio sin medalla, mencionando que los técnicos no reciben olímpicas pero obtendrán réplicas, mientras explicaba escuetamente la exclusión de Samu Omorodion por un tema médico privado. En la dramática final, Sergio Camello emergió como héroe al marcar dos goles en la prórroga, destacando tras una temporada discreta en el Rayo. Denia destacó la contribución del delantero, quien no siempre empezaba de titular pero mantenía el espíritu del equipo. A pesar de las complejas normativas de reservas y titulares en los Juegos, España logró un hito histórico en el fútbol olímpico, celebrando una victoria épica que será homenajeada en Las Rozas.
Leer noticia completa en El Pais.