La detección temprana es crucial en la mayoría de los tipos de cáncer, incluidos aquellos que pueden pasar desapercibidos, como el cáncer oral. A menudo, los primeros signos de esta enfermedad pueden ser confundidos con otras afecciones, lo que complica su identificación inicial. En este contexto, los odontólogos desempeñan un papel fundamental, ya que están formados para detectar rutinariamente signos potenciales de cáncer bucal durante las revisiones regulares. El cáncer oral se desarrolla en diversas áreas de la cavidad bucal, como los labios, la lengua, las encías y el revestimiento de la boca. Según la doctora Safa Al-Naher, dentista en Londres, algunos de los indicios a los que se debe prestar atención incluyen bultos, úlceras que no cicatrizan, sangrado inexplicable, manchas en la boca y cambios en la estabilidad de los dientes o prótesis.
Algunos signos de cáncer oral no siempre están presentes en la cavidad bucal. Un bulto o llaga en el labio que persiste, un nódulo en el cuello o ganglios linfáticos agrandados pueden ser señales alarmantes. Dificultades en el habla, como una voz más ronca o arrastrar las palabras, también son indicativos de atención. Otros síntomas asociados incluyen dolor de oído, el cual podría derivarse de daños en los nervios cerca de la lengua; dolor o dificultad al masticar o tragar; entumecimiento del labio o mandíbula, y dolor de garganta persistente. Los factores de riesgo principales para desarrollar cáncer oral abarcan el consumo de tabaco, el consumo excesivo de alcohol y la ingesta de bebidas muy calientes, lo que destaca la importancia de la prevención y la detección precoz en el manejo de esta enfermedad.
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