En una tarde marcada por la decepción en Las Ventas, el torero francés se destacó al enfrentar un sobrero de Zacarías Moreno, ofreciendo una faena que rompió con la monotonía de una jornada apagada. El encierro, caracterizado por la mansedumbre de los toros, no logró satisfacer a los aficionados, quienes esperaban más acción y bravura en el ruedo. Sin embargo, el francés logró conectar con el público al realizar una lidia llena de técnica y temple, convirtiéndose en el único punto luminoso de la tarde.
La actuación dejó un sabor agridulce, especialmente para Alberto Núñez Feijóo, quien abandonó la plaza decepcionado. La calidad del sobrero contrastó con el resto de la corrida, señalando la necesidad de mejorar la selección y presentación de los toros para futuros eventos. Esta jornada en Las Ventas subraya los desafíos que enfrenta la tauromaquia, donde la afición sigue demandando espectáculos a la altura de su pasión y expectativa.
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