La agencia europea de calificación crediticia, Scope Ratings, ha mejorado la nota crediticia del Reino de España, elevándola de A- a A con perspectiva estable. Esta decisión refleja una creciente confianza en la fortaleza y resiliencia de la economía española, así como en el proceso de consolidación fiscal en curso.
Factores clave de la mejora
La revisión al alza por parte de Scope Ratings se sustenta en varios factores. En primer lugar, se destaca el crecimiento económico robusto del país. La agencia subraya que España muestra un crecimiento diferencial en comparación con otras economías europeas, impulsado por la diversificación económica y el vigor del mercado laboral, potenciado por los flujos migratorios y las reformas implementadas.
Otro factor determinante es la ejecución efectiva del Plan de Recuperación. Scope Ratings valora positivamente la implementación de este plan, destacando su contribución al impulso de la inversión y a la mejora de las perspectivas de crecimiento a largo plazo.
Asimismo, la consolidación fiscal ha sido reconocida por la agencia. Los esfuerzos del Gobierno español en la reducción del déficit y la deuda pública han sido determinantes. Se prevé que el déficit disminuya hasta el 2,5% en 2025, el 2% en 2026 y el 1,8% en 2027.
Finalmente, la fortaleza del sector exterior ha sido otro factor considerado en la evaluación. La mejora de la posición externa del país ha contribuido significativamente a la revisión de la calificación crediticia.
Perspectivas futuras
Scope Ratings proyecta un escenario favorable para la economía española en los próximos años. Se espera que España mantenga un crecimiento superior al de las principales economías europeas. La diversificación económica continuará, potenciando una mayor resiliencia y mejora de la productividad.
Además, se prevé una reducción gradual de la ratio de deuda sobre PIB y un equilibrio primario en 2025. La mejora en la calificación crediticia representa un respaldo importante a la gestión económica del país. Esta situación puede traducirse en mejores condiciones de financiación en los mercados internacionales y refuerza la posición de España como un destino atractivo para la inversión extranjera.