En un significativo evento celebrado en el Centro Integral de Formación de Seguridad y Emergencias (CIFSE) del Ayuntamiento de Madrid, 151 agentes de movilidad han dado un paso trascendental en sus carreras al ser nombrados como nuevos policías municipales. Este grupo marca la primera promoción interna que da acceso al cuerpo específico de la Policía Municipal, un movimiento que subraya el reconocimiento y la confianza del Ayuntamiento en sus agentes de movilidad.
Inma Sanz, la vicealcaldesa y delegada de Seguridad y Emergencias, presidió el acto de entrega de despachos y resaltó la importancia de este nuevo sistema de promoción interna. «Reconocemos la experiencia y el compromiso con la ciudad de los agentes de movilidad, ofreciéndoles la oportunidad de desarrollar su carrera profesional en el ámbito de la seguridad urbana», declaró Sanz. Este cambio no solo supone un crecimiento profesional para los agentes, sino que también fortalece la Policía Municipal con profesionales que ya poseen un conocimiento profundo de los desafíos críticos de tráfico y movilidad en la capital.
Los nuevos policías municipales, con un promedio de edad de 49 años, ya están distribuidos en quince comisarías de distrito, destacando la comisaría de Tetuán, que ha recibido a 18 de estos agentes. También han sido integrados en comisarías especializadas como la de Emisora Central y Videoanálisis, Apoyo Vial y Transportes, y Análisis Vial y Urbano, lo que refleja la versatilidad y el amplio alcance del cuerpo policial.
Durante la ceremonia, Sanz reafirmó el «compromiso absoluto» del Ayuntamiento de Madrid con la Policía Municipal, liderado por el alcalde Almeida. Incluso siendo la mayor aportación de personal en la historia de la ciudad, Sanz insistió en la necesidad de aumentar el número de efectivos, haciendo un llamado al Gobierno de España para modificar la tasa de reposición que actualmente limita la incorporación de unos mil agentes adicionales.
El esfuerzo municipal por mejorar las condiciones de sus cuerpos de seguridad no se detiene en la promoción de personal. Incluye también la inversión en infraestructuras modernas y en la dotación de materiales de última tecnología, como drones y sistemas de videovigilancia. La formación continua es otro pilar fundamental, con el CIFSE esperando formar a más de 28.000 efectivos este año a través de una vasta oferta de cursos.
Para 2025, el presupuesto destinado a seguridad ascenderá a 519,2 millones de euros, una de las partidas más grandes del Ayuntamiento, reflejando la importancia de la seguridad para la ciudad. «Por grandes que sean las inversiones, lo más importante es lo que reflejan: la consideración y el reconocimiento de la ciudad de Madrid a los hombres y mujeres que formáis la Policía Municipal», concluyó Sanz, instando a los nuevos policías a estar a la altura de las expectativas y la confianza que los madrileños han depositado en ellos.